Los archivos del sacerdote de Málaga: cuatro carpetas llenas de cientos de fotos de contenido sexual

Los investigadores bucean en los archivos del padre Fran. La Policía rastrea en las cuatro carpetas del disco duro del detenido. Cuatro carpetas llenas de cientos de imágenes de carácter sexual, entre ellas las del sacerdote de Málaga y sus presuntas agresiones sexuales a mujeres, tomadas entre los años 2017 y 2019.

Algunas de las cinco víctimas que han denunciado al cura no quisieron ver las imágenes que les mostraban los agentes como prueba. Ni siquiera las más «suaves», y no recordaban haber sido agredidas por el sacerdote.

El padre Fran, sacerdote en Málaga, fue detenido el 11 de septiembre por los especialistas de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional. Desde que su exnovia lo denunció ante la Policía en Melilla y entregó el disco duro del sacerdote, los investigadores se afanan en identificar a las mujeres que presuntamente fueron sedadas y agredidas sexualmente por el cura.

Se trata de cientos de imágenes y de vídeos, algunos marcados con las iniciales de las mujeres que protagonizan las fotos. En ellas las mujeres posan adormecidas o inconscientes bajo los efectos de algún narcótico, mientas el sacerdote practica todo tipo de prácticas sexuales sin su consentimiento.

La Policía se enfrenta a un trabajo descomunal ya que las andanzas del sacerdote se remontan al año 2017 y siempre bajo el mismo modus operandi. El detenido, ya en prisión provisional, salía de fiesta con grupos de amigos y conocidos de asociaciones o campamentos religiosos, sedaba a alguna mujer, y posteriormente la agredía sexualmente cuando la víctima no podía defenderse.

Hasta el momento, los investigadores han identificado a cinco de las presuntas víctimas del sacerdote en Málaga, Córdoba y Melilla. En cuatro de los casos, el sacerdote agredió a las mujeres tal y como reflejan las imágenes. Los agentes también buscan víctimas en Madrid y Ciudad Real, siguiendo los pasos del sacerdote. A la vez, han comenzado a analizar el ingente contenido de los dispositivos electrónicos y pendrives que recogieron durante el registro de la casa del sacerdote en Vélez-Málaga.

La Policía contradice a la Iglesia

La operación se desencadenó en Melilla en enero de este año. Entonces, la ex pareja del sacerdote denunció a las autoridades eclesiásticas que era la pareja sentimental del cura y que había encontrado un disco duro con imágenes delictivas de contenido sexual que incluían agresiones sexuales a mujeres.

Sin embargo, la Iglesia se limitó a cambiar de destino al sacerdote, esta vez a Málaga, donde encontró una nueva pareja sentimental. Las autoridades eclesiásticas niegan que entonces la mujer les advirtiera del contenido de los cientos de imágenes sexuales pero la Policía Nacional les contradice y asegura que la denunciante sí les transmitió la existencia del disco duro.

Ya en agosto, la ex pareja del sacerdote en Melilla volvió a denunciar el asunto ante la Iglesia y ésta la derivó a la Policía que sí puso en marcha de inmediato una investigación con los resultados ahora conocidos.